Historias del barrio, de Gabi Beltrán y Bartolomé Seguí: honestidad a borbotones
Aprovechando la visita de Bartolomé Seguí a Viñetas desde o Atlántico, cuya exposición nos gustó especialmente en la parte de la obra que nos ocupa, repetimos lo que desde hace tiempo venimos diciendo: el cómic español está alcanzando cotas de calidad a las que nunca había llegado. Pudiera ser la consecuencia de que a los grandes dibujantes que siempre hemos tenido haya que sumar ahora una generación de guionistas capaces de sintetizar historias merecedoras de ser contadas.
Este libro, que parece va a tener continuidad, nos acerca a una realidad no muy lejana en la que algunos lectores (cuyas opiniones siempre tendremos en cuenta) han visto una pesada carga de drama social. Otros, para los que estos dramas han sido y son más cotidianos, vemos historias humanas de gran fuerza contadas de manera sublime tanto por la elegancia de la narrativa como por la honestidad del protagonista como narrador.
Tanto Seguí como Gabi Beltrán abordan su trabajo con absoluta clarividencia dándonos la posibilidad de sumergirnos en la marginalidad de los personajes y haciéndonos entender sus acciones y emociones con naturalidad.
Únicamente decir que lo que se cuenta son las experiencias de Gabi Beltrán en torno a 1980 cuando, con sólo quince años, la toma de algunas decisiones marca de manera determinante el devenir de su vida. Esto ambientado en su barrio natal de Palma de Mallorca, con un estilo gráfico magistral que no podemos imaginar más acertado. Sabemos que esta aportación de Seguí es el componente adecuado que da coherencia y nos hace ver con sencillez una realidad nada sencilla.
Nos quedamos por tanto a la espera de esa segunda parte. Si llega la agarraremos como quien encuentra un tesoro que lleva tiempo buscando, si no llega tampoco la echaremos en falta porque este tomo, que nos ha agarrado a nosotros, ha colmado también nuestros sentidos de poesía y emoción.
Historias del barrio
Gabi Beltrán / Bartolomé Seguí
Astiberri
Tomos: 1