Fatale. La muerte me persigue, de Brubaker y Phillips: Entre lo negro y lo sobrenatural
03/06/2013
Lo primero que pensé tras la lectura de Fatale. La muerte me persigue fue que era como si Roman Polanski hubiera mezclado Chinatown y La semilla del diablo en una sola película. Esta apuesta, a priori arriesgada, resulta sorprendentemente redonda en manos del equipo creativo formado por Ed Brubaker y Sean Philips, un dúo que rara vez decepciona tras acercarnos obras tan interesantes y recomendables como Sleeper, Incógnito o Criminal.
Lo cierto es que pocos casos conocemos donde la simbiosis entre dibujante y guionista sea tan perfecta. El texto de Brubaker, que bebe directamente de autores como Dashiel Hammett o Raymond Chandler, encuentra su complemento ideal en el dibujo de Philips, otro gran conocedor del género, y juntos toman elementos estereotípicos que moldean a su antojo para crear algo nuevo y diferente.
Esta perversión del clasicismo es especialmente visible en Fatale. En las primeras páginas Brubaker nos introduce en una historia llena de clichés noir (una mujer misteriosa, cruentos asesinatos, polis corruptos, mentiras y secretos…), pero pronto aparecerá en escena una misteriosa secta de fanáticos -que parecen salidos de un relato de Lovecraft- haciendo así que el relato oscile entre lo negro y lo sobrenatural. Los estereotipos están, asimismo, llenos de matices, lo que enriquece la narración y hace que nos metamos rápidamente en la historia.
Y de esta manera descubrimos a nuestro protagonista, Nicolas Lash, y cómo su vida va a cambiar de un día para otro tras conocer en el entierro de su padrino a Jo, una atractiva mujer dotada de un irresistible magnetismo (pero también de cierta fragilidad) y de la que nunca había oído hablar al difunto, a pesar de ser el amor de su vida. Este encuentro, junto al descubrimiento de una novela inédita del fallecido (que era un exitoso escritor de escaso talento) serán los detonantes de la acción y la intriga, que el dúo creativo hilvana de manera magistral y equilibrada.
Su poderoso ritmo y su compleja (pero asequible para leer) estructura, con continuos saltos entre varios planos temporales distintos, conforman una lectura muy recomendable y llena de interrogantes, muchos de los cuales quedan pendientes de respuesta para futuros volúmenes.
Y es que si queremos buscarle alguna pega a esta obra será por el hecho de ser un primer número y que la serie quede abierta. Pensada inicialmente como una colección de doce entregas (de las cuales este tomo recoge las cinco primeras) su éxito provocó que Brubaker y Philips profundizaran aún más en su creación prolongando la serie.
Y sí, l@s komiqueir@s habituales sabéis que no solemos hablar aquí de series sin cerrar, pero no nos hemos podido resistir a los encantos de esta arquetípica y fascinante femme fatale. ¿Y vosotr@s?
Fatale. La muerte me persigue
Ed Brubaker / Sean Phillips
Panini
Tomos: 1
, pero pronto aparecerá en escena una misteriosa secta de fanáticos -que parecen salidos de un relato de Lovecraft- haciendo así que el relato oscile entre lo negro y lo sobrenatural. Los estereotipos están, asimismo, llenos de matices, lo que enriquece la narración y hace que nos metamos rápidamente en la historia.Y de esta manera descubrimos a nuestro protagonista, Nicolas Lash, y cómo su vida va a cambiar de un día para otro tras conocer en el entierro de su padrino a Jo, una atractiva mujer dotada de un irresistible magnetismo (pero también de cierta fragilidad) y de la que nunca había oído hablar al difunto, a pesar de ser el amor de su vida. Este encuentro, junto al descubrimiento de una novela inédita del fallecido (que era un exitoso escritor de escaso talento) serán los detonantes de la acción y la intriga, que el dúo creativo hilvana de manera magistral y equilibrada.Su poderoso ritmo y su compleja (pero asequible para leer) estructura, con continuos saltos entre varios planos temporales distintos, conforman una lectura muy recomendable y llena de interrogantes, muchos de los cuales quedan pendientes de respuesta para futuros volúmenes.Y es que si queremos buscarle alguna pega a esta obra será por el hecho de ser un primer número y que la serie quede abierta. Pensada inicialmente como una colección de doce entregas (de las cuales este tomo recoge las cinco primeras) su éxito provocó que Brubaker y Philips profundizaran aún más en su creación prolongando la serie.Y sí, l@s komiqueir@s habituales sabéis que no solemos hablar aquí de series sin cerrar, pero no nos hemos podido resistir a los encantos de esta arquetípica y fascinante femme fatale. ¿Y vosotr@s?Fatale. La muerte me persigueEd Brubaker / Sean PhillipsPaniniTomos: 1 "Compartir en Facebook")
