Come Prima, de Alfred: un viaje fraternal hacia la memoria
28/04/2014
Obtener la Fauve d'Or (premio a la mejor obra del año) en el Festival de Angoulême es una de las mayores recompensas a las que puede aspirar un autor europeo, un honor y un espaldarazo a su carrera profesional. Para el lector, aficionado y comprador habitual de cómics, este premio supone una garantía de calidad, aunque no siempre conlleva un entusiasmo enorme por la obra o por su autor.
A nosotros no nos pasaron desapercibidos ni nos dejaron indiferentes ninguno de los anteriores trabajos de Alfred editados en España: Por qué he matado a Pierre (con guión de Oliver Ka, Ponent Mon) y No moriré cazado (Astiberri), en ambos casos historias realistas y dramáticas que no alcanzaban el preciosismo gráfico de la obra que hoy nos ocupa.
En Come Prima dos hermanos de origen italiano inician un viaje después de diez años sin verse. La acción se sitúa en torno a 1960. En un pequeño Fiat 500 se dirigen desde Francia a su pueblo natal. Serán cientos de kilómetros y muchos los recuerdos que compartiremos con estos dos personajes de carácter opuesto forzados a reencontrarse por motivaciones bien distintas.
El autor dosifica con precisión y ritmo constante la información que necesitamos, y alterna la acción presente con flashbacks en los que utiliza un estilo menos detallado, más pictórico, muy adecuado a lo que se va rescatando de la memoria de la infancia y la juventud de los protagonistas.
Uno de los puntos fuertes de Come Prima es la confortable sensación del viaje como una sucesión de bucólicos paisajes mediterráneos y alpinos, pueblos preindustriales tratados de manera exquisita tanto en el dibujo como en el color. Se crea un fuerte contraste entre la placidez que se transmite así y las situaciones de tensión, e incluso violencia, entre los dos hermanos. Los aficionados al cine clásico inevitablemente encontrarán referencias al costumbrismo y al neorrealismo italiano que aquí se traslada al lenguaje secuencial.
Ante un galardón de esta envergadura podemos asegurar que nos enfrentamos a una buena lectura, aunque siempre nos queda la duda de si habrá algún otro título del año publicado en el mercado francés que nos pudiera haber gustado aún más.
Come Prima
Alfred
Salamandra Graphic
Tomos: 1
