Operario, de Jano Viñuela: exprimiendo al máximo el poder evocador de las imágenes
Operario es un relato sorprendente y hermosamente dibujado con el que Demo Editorial inaugura una nueva colección, Demográfica, que, según su editor Manel Cráneo, estará destinada a libros de pequeño formato donde las imágenes pesarán por encima de las palabras. Y ésta es precisamente la mejor definición de la pequeña maravilla que nos acerca Jano Viñuela, ilustrador e historietista coruñés afincado en Vigo.
Operario presenta una historia muda en blanco y negro que nos cuenta un día en la vida de un obrero de fábrica, empleando solo las imágenes y exprimiendo al máximo su poder evocador, algo que percibimos al terminar su lectura y darnos cuenta de que este librito esconde en su interior mucho más de lo que podíamos esperar.
Resulta difícil enumerar la cantidad de temas sobre los que reflexiona el autor, que sitúa la acción en unos años veinte casi atemporales: el poder alienante del trabajo, las necesidades creadas por la sociedad, la dicotomía entra campo y ciudad, el control del obrero por el empresario o la manipulación que el poder hace del orden establecido.
Temas todos estos que trata (o sugiere) con una envidiable economía de medios narrativos gracias a un dibujo en el que podemos encontrar influencias de grandes dibujantes y diseñadores modernos (Seth, Chris Ware) así como de pioneros del noveno arte (como el expresionista belga Masereel), al tiempo que posee un estilo cada vez más propio y característico de Jano, que consigue aquí uno de sus mejores trabajos.
Está publicado de manera sencilla pero cuidada por Demo Editorial, que continúa realizando una política editorial coherente, variada y comprometida con el comic gallego, como demuestra con este libro irónico y diferente. Un libro que invita a la reflexión y en la que la conciencia obrera tiene también un peso importante (el cultismo operari@ comparte raíz latina con obrer@), algo muy necesario en los tiempos que corren.
Operario
Jano
Demo Editorial
Tomos: 1